"La vida eterna" es una intrigante y provocadora novela que nos sumerge en un mundo oscuro donde la temática vampírica se entrelaza con las relaciones humanas tóxicas.
Escrito por Alberte Momán, conocido por su particular enfoque en el género pulp y su uso creativo de elementos cotidianos en su narrativa que lo han convertido en un autor con una voz única en la literatura contemporánea. A través de sus obras, Alberte Momán busca ofrecer al lector una perspectiva particular de la realidad y adentrarse en aspectos profundos y perturbadores de la condición humana.
Recientemente nos impactó con "La efímera edad de las manos" con ese estilo arriesgado y provocador que lo ha hecho ganar seguidores y críticas positivas en la escena literaria y con esta obra lo vuelve a hacer presentándonos una historia breve pero rotunda, que explora la decadencia social y el individualismo llevado al extremo.
La trama se desenvuelve en ese particular estilo pulp, caracterizado por su rapidez y concisión, presentándonos una narración llena de imágenes crudas y secuenciadas, casi como si estuviéramos viendo una película de acción. Esta elección narrativa, además de mantener la dinamicidad de la historia, sirve como un artefacto para la reflexión, invitando a los lectores a sumergirse en pequeños aforismos vinculados a la obra, que incitan a la introspección sin interrumpir el curso de los acontecimientos.
El autor nos adentra en un mundo en el que las relaciones personales se han convertido en algo inexistente, mostrándonos un retrato crudo y perturbador de una sociedad obsesionada con el individualismo extremo. Aunque el género vampírico es evidente en la narrativa, el foco principal de la novela se encuentra en las relaciones personales, especialmente en aquellas que son tóxicas, introduciéndonos en el concepto de lo que podíamos llamar vampirismo social.
"La vida eterna" es una narración fácil de leer, pero al mismo tiempo, encierra un profundo poso sobre el cual el lector puede reflexionar. El texto ofrece diversas capas de significado y posibles interpretaciones, lo que permite a cada lector descubrir, explorar y hacer esa reflexión guiándolo hacia sus inquietudes más profundas.
La novela nos sumerge en un viaje a través de la decadencia social, destacando cómo el individualismo excesivo puede conducir a un desenlace oscuro y desalentador. El autor logra plasmar una historia que se siente cercana a la vida real, con personajes complejos y situaciones que reflejan la cruda realidad de las relaciones humanas en la sociedad contemporánea.
En resumen, "La vida eterna" es una novela impactante que combina elementos del género vampírico con una exploración profunda de las relaciones personales tóxicas, a través de un estilo que podríamos llamar neopulp dado que la obra invita a la reflexión pero presenta una narración dinámica que cautivará a los lectores ávidos de una experiencia literaria provocadora y emocionante.
Mónica Expósito Castro. Julio 2023